
Río Kolitza
El río Kolitza recorre discretamente los márgenes de Amalurra, fluyendo entre árboles, piedras y senderos
Toma su nombre del monte en el que nace y lleva consigo la memoria del territorio.
No es un espacio diseñado ni intervenido, sino un regalo del entorno que invita a la pausa y a la presencia. Observar su curso, detenerse en su orilla o descender hacia la pequeña cascada que alberga son formas sencillas de entrar en otro ritmo, más presente y sereno. Su murmullo acompaña, envuelve y enseña sin palabras. El río aporta frescura, movimiento y vida, recordando que en la naturaleza nada vive separado y que todo está en movimiento, cambio y transformación constante.